Esta película narra la historia de Anna (Emily Browing, “Lemony Snciket”), una joven traumatizada por la muerte de su madre y que después de casi un año de tratamiento es dada de alta del hospital psiquiátrico en el cual estaba internada. Al regresar a su casa, siente que algo muy extraño esta pasando, además de que su madre ya no esta, su hermana se ve un poco distancia de todos los que viven en esa casa y se entera que la que fuera la enfermera de su madre es ahora la nueva novia de su padre, con el que tampoco lleva una buena relación.
Como si esto no fuera poco para Anna, empiezan a ocurrir varios eventos extraños en la casa y empieza a tener sueños espeluznantes. Ella deberá asimilarlos y enfrentarlos para proteger a su familia a como de lugar.
Debo confesar que no soy fan de las películas de terror, pero debo admitir que ésta película superó en gran medida mis expectativas, sobre todo por que no es la típica historia que se cuenta en todas películas de terror en donde esta la chica bonita y tonta que la atacan los demonios y fantasmas. La historia de esta película es inesperada, no es tan predecible y el final te deja un buen sabor de boca.
Es por eso que no cuento mucho de la trama de la película ya que sería quitarle el chiste a la misma, por eso es que la recomiendo, no será le película del año pero cumple con su cometido.
Así que si gustas de espantarte en el cine o de reírte de cómo tu pareja o amigos brincan en la butaca, esta película es la indicada para ti.
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